hola!
Este sueño comienza en mi infancia, en Dolores, un pueblo muy dulcero a 220 km de la capital porteña. Tortas, budines, y otras especialidades de la pastelería representaban las mesas de mi familia.
Mis abuelas, mis tías, Carmen, mi mamá e incluso mi padre, quien supo aprender de harinas y levaduras con tal de disfrutar una rica torta frita, me motivaron a emprender mi propio camino.
Es así, como después de mucho aprendizaje, junto a colegas a quienes hoy puedo llamar amigos, y un equipo con el que trabajamos todos los días, materialicé mi sueño.
Los invito a disfrutar y saborear mi historia en Betular Pâtisserie.